Antes de la venida del Hijo del hombre existía, y había existido durante años, una determinación de parte del enemigo de arrojar su sombra infernal entre el ser humano y su Salvador. ¿Para qué? Para que el pecador no reconozca que Jesús es un salvador completo, que es un sacrificio pleno lo que ha sido realizado a favor del hombre. Luego Satanás les dice que no tienen que guardar la ley porque al observarla el ser humano se uniría con el poder divino y Satanás sería derrotado. Al cumplir la ley, el hombre se uniría al poder divino. A pesar de que el hombre estaba afectado por sus flaquezas, podría llegar a ser participante de la naturaleza divina, escapando de la corrupción que hay en el mundo por causa de las pasiones. He aquí la gran obra de la redención. SE1 105.3
Cristo no vino a abolir la ley, puesto que afirma: «Ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido». Por tanto, la ley permanece hasta ahora. Sí, no hay ni una jota ni una tilde que haya perdido su vigencia, y todos estamos bajo la ley. Esa es la situación en la que nos encontramos hoy; y si algunos se oponen a la ley, Dios los condena; porque no hemos sido dejados en oscuridad respecto a esto. SE1 105.4
Deseo guardar la ley de Dios y vivir. Pero el hombre de pecado ha intentado cambiar el cuarto mandamiento y ha introducido un día de reposo espurio, para así mostrar su grandeza y el poder para exaltarse a sí mismo sobre todo lo que se llama Dios, o que es objeto de culto. Está llegando el momento de decidir entre el día de reposo que el hombre de pecado ha introducido, y el día de reposo del Señor Dios, el séptimo día. SE1 106.1
Habrá momentos difíciles que tendremos que afrontar, y ¿qué desea decirnos Dios al respecto? Él desea que tratemos de entender lo que no hemos entendido. Más bien hemos permanecido aquí gimiendo y gimiendo. Cuando intenté hacer el bien, el mal estaba presente en mí y el pecado obraba constantemente con el fin de obtener la supremacía. Si pudieran ustedes entender que Cristo es alguien que puede salvar perpetuamente a todos los que por él se acercan a Dios, entonces poseerían una fe viva. SE1 106.2