En un discurso del ex gobernador John P. St. John, de Kansas, en Ottawa, Illinois, que escuché la tarde del 29 de junio de 1891, él hizo la siguiente declaración: GMA 284.1
“Nunca estuve tan chasqueado como cuando los [confederados] nos dieron una paliza en Bull Run. Pero todo era parte del plan de Dios. Si nosotros hubiéramos dado una paliza [a los confederados], los políticos hubieran pedido la paz, y la Unión hubiera seguido con la esclavitud, y la hubiéramos tenido hasta hoy. Durante dos años [los confederados] tuvieron la ventaja; pero después que Lincoln promulgó la famosa proclama de emancipación, nos pusimos de parte de Dios, y no podíamos perder”. GMA 284.2