Ahora es cuando nuestros hermanos debieran estar reduciendo sus propiedades en vez de aumentarlas. Estamos por trasladarnos a una patria mejor, a saber la celestial. No seamos, pues, moradores de la tierra, sino más bien reduzcamos nuestras cosas a la menor cantidad posible. CMC 63.2
Viene el tiempo cuando no podremos vender a ningún precio. Pronto se proclamará el decreto que prohibirá comprar o vender a nadie que no tenga la marca de la bestia.—Testimonies for the Church 5:152. CMC 63.3