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Una poderosa defensa contra la tentación, 22 de agosto AFC64 242

Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados. Hebreos 2:18. AFC64 242.1

Nuestro Redentor comprendió perfectamente las necesidades de la humanidad. El, que condescendió a tomar la naturaleza humana, conocía las flaquezas del hombre. Cristo vivió como nuestro ejemplo. Fue tentado en todo como nosotros lo somos, para saber cómo socorrer a los que fueran tentados. Recorrió el camino de la vida delante de nosotros, y soportó las pruebas más severas para nuestro bien. Fue un varón de dolores, experimentado en quebrantos. AFC64 242.2

Cristo tomó sobre sí nuestras flaquezas, y con la debilidad de la humanidad, necesitó buscar ayuda de su Padre. A menudo se lo encontraba en ferviente oración, en el huerto, junto al lago y en los montes. Nos ha ordenado velar y orar. ... Sin un profundo sentido de nuestra necesidad de ayuda de Dios, habrá tan sólo muy poca oración ferviente y sincera en demanda de ayuda. Nuestro corazón es engañoso, nuestros enemigos son muchos, y están alerta. Si descuidamos de fortalecer un solo punto débil de nuestro carácter, Satanás nos asaltará en ese punto con sus tentaciones. Está tramando constantemente la ruina del alma, y se aprovechará en cada detalle de nuestro descuido. AFC64 242.3

Cristo vino al mundo para entablar un combate contra el enemigo del hombre, y así libertar a la humanidad de las garras de Satanás. En el cumplimiento de este objetivo, no rehusó ni aun su propia vida. Y ahora, con la fortaleza que Cristo dará, el hombre debe permanecer por sí mismo, como fiel centinela contra el astuto enemigo que siempre urde sus planes. El gran apóstol dijo: Andad “no como necios sino como sabios” (Efesios 5:15), cuidad cada avenida del alma, mirad constantemente a Jesús, el modelo verdadero y perfecto, y procurad imitar su ejemplo, no sólo en una o dos cosas, sino en todo. Entonces estaremos preparados para toda emergencia.—The Review and Herald, 11 de octubre de 1881. AFC64 242.4