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El ideal de Dios para su iglesia, 9 de octubre FV 290

Para presentársela gloriosa para sí, una iglesia que no tuviese mancha ni arruga, ni cosa semejante; sino que fuese santa y sin mancha. Efesios 5:27. FV 290.1

“El Señor es un Dios celoso; sin embargo es muy tolerante con los pecados y transgresiones de su pueblo en esta generación. Si el pueblo de Dios hubiera andado en sus consejos la obra de Dios habría avanzado, los mensajes de la verdad hubieran llegado a toda la gente que habita la faz de la tierra.... Pero porque el pueblo es desobediente, ingrato y sin santidad como el antiguo Israel ... la obra del Señor ha sido obstaculizada y el tiempo del sellamiento postergado.”—Carta 106, 1897. FV 290.2

“¿Qué estáis haciendo, hermanos, en la gran obra de preparación? Los que se unen con el mundo reciben su molde y se preparan para la marca de la bestia. Los que desconfían de sí mismos, se humillan delante de Dios y purifican sus almas obedeciendo a la verdad, son los que reciben el molde celestial y se preparan para tener el sello de Dios en sus frentes. Cuando se promulgue el decreto y se estampe el sello, su carácter permanecerá puro y sin mancha para la eternidad. FV 290.3

“Ahora es el momento de prepararse. El sello de Dios no será nunca puesto en la frente de un hombre o una mujer que sean impuros. Nunca será puesto sobre la frente de seres humanos ambiciosos y amadores del mundo. Nunca será puesto sobre la frente de hombres y mujeres de corazón falso o engañoso. Todos los que reciban el sello deberán estar sin mancha delante de Dios y ser candidatos para el cielo.”—Joyas de los Testimonios 2:71. FV 290.4