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El testimonio de Jesús, 16 de octubre FV 297

Y yo me eché a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira que no lo hagas; yo soy siervo contigo, y con tus hermanos que tienen el testimonio de Jesús: adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de profecía. Apocalipsis 19:10. FV 297.1

“Sobre todos los demás libros, la Palabra de Dios debe ser el objeto de nuestro estudio, el gran libro de texto, el fundamento de toda educación.”—Testimonies for the Church 6:131. FV 297.2

“Pocos de entre vosotros saben realmente lo que contienen los Testimonios. No estáis familiarizados con las Escrituras. Si os hubieseis dedicado a estudiar la Palabra de Dios, con un deseo de alcanzar la norma de la Biblia y la perfección cristiana, no habríais necesitado los Testimonios. Es porque habéis descuidado el familiarizaros con el Libro inspirado de Dios por lo que él ha tratado de alcanzaros mediante testimonios sencillos y directos.... FV 297.3

“El Señor quiere amonestaros, reprenderos, aconsejaros, por medio de los testimonios dados y grabar en vuestra mente la importancia de la verdad de su Palabra. Los Testimonios escritos no son dados para proporcionar nueva luz, sino para impresionar vívidamente en el corazón las verdades de la inspiración ya reveladas. El deber del hombre hacia Dios y sus semejantes ha sido especificado distintamente en la Palabra de Dios. Sin embargo, son pocos entre vosotros los que obedecen a la luz dada. No son sacadas a relucir verdades adicionales; sino que Dios ha simplificado por medio de los Testimonios las grandes verdades ya dadas, y en la manera que ha elegido, las ha presentado a la gente, para despertar e impresionar su mente con ellas, a fin de que todos queden sin excusa.”—Testimonios Selectos 4:223, 224. FV 297.4