1 Aconteció que cuando Isaac había envejecido, sus ojos se debilitaron, y no podía ver. Entonces llamó a Esaú, su hijo mayor, y le dijo: —Hijo mío. El respondió: —Heme aquí. RVa — Génesis 27:1
2 Le dijo: —He aquí, yo ya soy viejo y no sé el día de mi muerte. RVa — Génesis 27:2
3 Toma, pues, ahora tu equipo, tu aljaba y tu arco, y vé al campo a cazar algo para mí. RVa — Génesis 27:3
4 Luego hazme un potaje como a mí me gusta. Tráemelo para que coma, y yo te bendiga antes que muera. RVa — Génesis 27:4
5 Rebeca estaba escuchando cuando Isaac hablaba a su hijo Esaú. Cuando Esaú fue al campo para cazar lo que había de traer, RVa — Génesis 27:5
6 Rebeca habló a su hijo Jacob diciendo: —He aquí, he oído a tu padre que hablaba con tu hermano Esaú, diciendo: RVa — Génesis 27:6
7 “Caza para mí y hazme un potaje para que coma y te bendiga en presencia de Jehovah, antes de mi muerte.” RVa — Génesis 27:7
8 Ahora pues, hijo mío, obedéceme en lo que te mando: RVa — Génesis 27:8
9 Vé al rebaño y tráeme de allí dos buenos cabritos; y yo haré con ellos un potaje para tu padre, como a él le gusta. RVa — Génesis 27:9
10 Tú se lo llevarás a tu padre; y comerá, para que te bendiga antes de su muerte. RVa — Génesis 27:10
11 Jacob dijo a Rebeca su madre: —He aquí que Esaú mi hermano es hombre velludo, y yo soy lampiño. RVa — Génesis 27:11
12 Quizás me palpe mi padre y me tenga por un farsante, y traiga sobre mí una maldición en vez de una bendición. RVa — Génesis 27:12
13 Su madre le respondió: —Hijo mío, sobre mí recaiga tu maldición. Tú solamente obedéceme; vé y tráemelos. RVa — Génesis 27:13
14 Entonces él fue, tomó los cabritos y se los trajo a su madre. Y ella hizo un potaje como le gustaba a su padre. RVa — Génesis 27:14
15 Luego Rebeca tomó la ropa más preciada de Esaú, su hijo mayor, que ella tenía en casa, y vistió a Jacob, su hijo menor. RVa — Génesis 27:15
16 Y puso las pieles de los cabritos sobre las manos y sobre el cuello, donde no tenía vello. RVa — Génesis 27:16
17 Luego puso el potaje y el pan, que había preparado, en las manos de Jacob su hijo. RVa — Génesis 27:17
18 Y él fue a su padre y le dijo: —Padre mío. El respondió: —Heme aquí. ¿Quién eres, hijo mío? RVa — Génesis 27:18
19 Jacob respondió a su padre: —Yo soy Esaú, tu primogénito. He hecho lo que me dijiste. Por favor, levántate, siéntate y come de mi caza, para que tú me bendigas. RVa — Génesis 27:19
20 Entonces Isaac preguntó a su hijo: —¿Cómo es que pudiste hallarla tan pronto, hijo mío? El respondió: —Porque Jehovah tu Dios hizo que se encontrase delante de mí. RVa — Génesis 27:20
21 E Isaac dijo a Jacob: —Por favor, acércate y te palparé, hijo mío, a ver si tú eres mi hijo Esaú, o no. RVa — Génesis 27:21
22 Jacob se acercó a su padre Isaac, quien le palpó y dijo: —La voz es la voz de Jacob, pero las manos son las manos de Esaú. RVa — Génesis 27:22
23 No lo pudo reconocer, porque sus manos parecían tan velludas como las manos de su hermano Esaú, y lo bendijo. RVa — Génesis 27:23
24 Le preguntó: —¿Eres tú realmente mi hijo Esaú? El respondió: —Sí, yo soy. RVa — Génesis 27:24
25 Le dijo: —Acércamela; comeré de la caza de mi hijo, para que yo te bendiga. Jacob se la acercó, e Isaac comió. Le trajo también vino, y bebió. RVa — Génesis 27:25
26 Entonces le dijo su padre Isaac: —Acércate, por favor, y bésame, hijo mío. RVa — Génesis 27:26
27 El se acercó y lo besó. Y al percibir Isaac el olor de su ropa, lo bendijo diciendo: —He aquí, el olor de mi hijo es como el olor del campo que Jehovah ha bendecido. RVa — Génesis 27:27
28 Dios te dé del rocío del cielo y de lo más preciado de la tierra: trigo y vino en abundancia. RVa — Génesis 27:28
29 Que los pueblos te sirvan, y las naciones se postren ante ti. Sé señor de tus hermanos, y póstrense ante ti los hijos de tu madre. Sean malditos los que te maldigan, y benditos los que te bendigan. RVa — Génesis 27:29
30 Y sucedió luego que Isaac había terminado de bendecir a Jacob, y cuando apenas había salido Jacob de la presencia de su padre Isaac, que su hermano Esaú llegó de cazar. RVa — Génesis 27:30
31 El también hizo un potaje, lo llevó a su padre y le dijo: —Levántate, padre mío, y come de la caza de tu hijo, para que tú me bendigas. RVa — Génesis 27:31
32 Entonces su padre Isaac le preguntó: —¿Quién eres tú? El respondió. —Yo soy Esaú, tu hijo primogénito. RVa — Génesis 27:32
33 Isaac se estremeció fuertemente y dijo: —¿Quién, pues, es el que vino aquí, que cazó y me trajo de comer, y yo comí de todo antes de que tú vinieses? ¡Yo lo bendije, y será bendito! RVa — Génesis 27:33
34 Cuando Esaú oyó las palabras de su padre, profirió un grito fuerte y muy amargo. Y dijo a su padre: —¡Bendíceme también a mí, padre mío! RVa — Génesis 27:34
35 El dijo: —Tu hermano vino con engaño y se llevó tu bendición. RVa — Génesis 27:35
36 El respondió: —¿No es cierto que llamaron su nombre Jacob? Pues ya me ha suplantado estas dos veces: Se llevó mi primogenitura, y he aquí que ahora también se ha llevado mi bendición. —Y añadió—: ¿No te queda una bendición para mí? RVa — Génesis 27:36
37 Isaac respondió y dijo a Esaú: —He aquí, yo lo he puesto por señor tuyo, y le he dado como siervos a todos sus hermanos. Le he provisto de trigo y de vino. ¿Qué, pues, haré por ti, hijo mío? RVa — Génesis 27:37
38 Esaú dijo a su padre: —¿No tienes más que una sola bendición, padre mío? ¡Bendíceme también a mí, padre mío! Y Esaú alzó su voz y lloró. RVa — Génesis 27:38
39 Entonces respondió Isaac su padre y le dijo: —He aquí, será favorecido el lugar que habites con los más preciados productos de la tierra y con el rocío del cielo arriba. RVa — Génesis 27:39
40 De tu espada vivirás y a tu hermano servirás. Pero sucederá que cuando adquieras dominio, romperás su yugo de sobre tu cuello. RVa — Génesis 27:40
41 Esaú aborreció a Jacob por la bendición con que le había bendecido su padre, y dijo en su corazón: “Se acercan los días de duelo por mi padre; entonces yo mataré a mi hermano Jacob.” RVa — Génesis 27:41
42 Fueron dichas a Rebeca las palabras de Esaú, su hijo mayor. Ella envió a llamar a Jacob, su hijo menor, y le dijo: —He aquí que Esaú tu hermano planea vengarse de ti, matándote. RVa — Génesis 27:42
43 Ahora pues, hijo mío, obedéceme: Levántate y huye a mi hermano Labán, en Harán. RVa — Génesis 27:43
44 Pasa con él algún tiempo, hasta que el enojo de tu hermano se aplaque, RVa — Génesis 27:44
45 hasta que se aplaque la ira de tu hermano contra ti y se olvide de lo que le has hecho. Entonces yo mandaré a traerte de allá. ¿Por qué habré de ser privada de vosotros dos en un solo día? RVa — Génesis 27:45
46 Rebeca dijo a Isaac: —Estoy hastiada de vivir por causa de las mujeres heteas: Si Jacob toma esposa de entre las mujeres heteas, de las mujeres de esta tierra, como éstas, ¿para qué quiero la vida? RVa — Génesis 27:46