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Sermones Escogidos Tomo 1

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    El fuerte clamor del mensaje del tercer ángel

    Se me dijo: «Habla al pueblo todas las palabras que yo te daré. Despierta a los valientes. Que se despierten por completo, para que con la pluma y voz estremezcan al pueblo al que Dios ha dado gran luz, a fin de que dejen brillar su luz con rayos claros y constantes sobre el mundo”. Hay que amonestar al mundo, y cuando el mensaje del tercer ángel resuene a gran voz, las almas estarán plenamente preparadas para tomar decisiones a favor o en contra de la verdad.SE1 84.4

    El gran esfuerzo lo realizarán Satanás y sus malvados ángeles unidos con hombres impíos que fijarán su destino al invalidar la ley de Dios a pesar de la evidencia convincente de su Palabra, que es inconmovible y eterna. Precisamente llegará el tiempo del cual escribió el profeta y el fuerte clamor del tercer ángel se escuchará en la tierra, su gloria iluminará al mundo y el mensaje triunfará. Pero los que no anden en su luz no triunfarán con él.SE1 85.1

    Ya es demasiado tarde para que los seres humanos se complazcan y se glorifiquen a sí mismos. Ministros de Dios, es demasiado tarde para estar luchando por la supremacía. Ha llegado el solemne tiempo cuando los pastores deben gemir entre la entrada y el altar, exclamando: «Perdona, oh Jehová, a tu pueblo, y no entregues al oprobio tu heredad” (Joel 2: 17). Es un tiempo para que, en vez de elevar sus almas con suficiencia propia, tanto los dirigentes como los miembros confiesen sus pecados delante de Dios y el uno al otro. La ley de Dios ha sido invalidada, y aun entre los que defienden sus obligatorias demandas hay quienes quebrantan sus sagrados preceptos.SE1 85.2

    Un ejército de creyentesSE1 85.3

    La Biblia será abierta de casa en casa, y hombres y mujeres hallarán acceso a esos hogares. Las mentes se abrirán para recibir la Palabra de Dios y cuando venga la crisis muchos estarán preparados para tomar las decisiones correctas, incluso frente a las tremendas dificultades que serán provocadas por los milagros engañosos de Satanás. A pesar de que muchos aceptarán la verdad y llegarán a ser obreros de Cristo en la hora undécima, recibirán igual pago que aquellos que han trabajado todo el día (Mat. 20: 1-16).SE1 85.4

    Habrá un ejército de creyentes fieles que soportarán firmes como una roca la última prueba. Pero ¿dónde están los que han sido portaestandartes en ese ejército? ¿Dónde están aquellos cuyas voces han resonado al proclamar la verdad a los pecadores? Algunos de ellos no están aquí. Los buscamos, pero no pudieron resistir el tiempo del zarandeo y se pasaron a las filas del enemigo. Cristo le dice al que siente su debilidad: «¿Se acogerá alguien a mi amparo? ¡Que haga conmigo paz!, ¡sí, que haga la paz conmigo!» (Isa. 27: 5).SE1 85.5

    El poder de Dios está presto para atender el clamor de la fe sincera. El Señor Jesús ha venido a nuestro encuentro en este Congreso. Agradezco a Dios por la contrición que he visto en las reuniones de oración de los pastores. El Señor se ha estado moviendo en los corazones de los pastores para que estos se aferren a su fuerza. Sin embargo, por alguna razón, aquellos que más necesitan de la influencia de estas reuniones no han estado presentes. Los que más precisan beber de la fuente de vida, que deberían estar a la vanguardia de nuestras filas, no han recibido el poder que Dios ha estado dispuesto a derramar sobre ellos. El futuro manifestará los resultados de no aprovechar estas preciadas reuniones matinales. Han pasado varios días, y algunos no han humillado sus almas delante de Dios. ¡Oh!, ¿acaso lo pasará por alto el Señor? Ellos son los que más necesitan escuchar cada palabra que el Cielo tiene para ellos.SE1 85.6

    Quienes anhelen ahora ayudar a las almas carentes de sabiduría, santificación y justicia, deben tener puesta toda la armadura de la justicia de Cristo, porque no podemos conducir al pueblo a una experiencia de la que no somos partícipes. Los que no han gustado la rica bendición de Dios no valorarán las bendiciones que otros han recibido. La luz que Dios está dando a su pueblo puede ser despreciada, negada, rechazada, pero al hacerlo se corre el gran riesgo de perder las almas de los hombres. Hermanos, Dios está trabajando por nosotros, y lamento profundamente que un solo rayo de luz enviado por el cielo sea recibido con indiferencia. La comunicación de Dios con nosotros ha de ser apreciada y estimada. Si no apreciamos la luz del cielo, ello provocará nuestra condenación; nuestra posición será similar a la de los judíos cuando rechazaron al Señor de la vida y la gloria.SE1 86.1

    Espero que las palabras que he hablado no salgan de sus corazones como el agua de un recipiente agrietado. No les he hablado mis propias palabras. Le prometí al Señor que si me permitía reunirme de nuevo con ustedes no retendría la verdad, aunque esto quizá no les agrade a todos. Sé que hay algunos que se beneficiarán, y en el día de la recompensa, el mayordomo fiel, el fiel pastor de la grey, ellos recibirán una corona de gloria. Les suplico, por amor a Cristo, que no permitan que el espíritu del enemigo tome posesión de ustedes, y que como consecuencia la obra sea mancillada por ustedes.SE1 86.2

    Necesitamos mucho la ayuda del pastor Littlejohn. Dios no lo ha desligado de la obra. Deseamos sinceramente que el pastor Smith tenga el poder de la gracia de Cristo a cada paso, que tenga a Cristo como su consejero, porque Satanás tratará seguramente de dejar en su mente impresiones que serán perjudiciales no solo para su propia alma, sino para la grey de Dios. Él ha desempeñado un papel en esta obra casi desde sus inicios. El mensaje del tercer ángel triunfará. ¡Ojalá que el pastor Smith pueda triunfar en esto y pueda tener la plena certeza de la aprobación de Dios en toda su obra! Él se halla en peligro de tomar decisiones equivocadas, y debido a su temperamento, será muy difícil para él reconocer que se ha equivocado.SE1 86.3

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