La correspondencia, tanto la que iba como la que venía, era una parte importante del programa de Elena de White y de aquellos que estaban con ella en Nueva Zelanda. MV 365.2
El domingo 23 de abril de 1893, ella se levantó temprano, a las 3:30 de la mañana, para preparar la correspondencia hacia Melbourne, esperando que saliese el lunes. MV 365.3
Ese mismo domingo, llegó un paquete grande de cartas. Había una carta larga de O. A. Olsen, presidente de la Asociación General, dando un resumen completo de la sesión de la Asociación General e informando sobre la confesión de un número de hombres prominentes que habían tomado una posición equivocada en la sesión de la Asociación General de 1888. MV 365.4
Otra carta era de Leroy Nicola, un pastor prominente en Iowa. Fue la carta de Nicola la que le produjo un regocijo especial. Fue “una confesión muy completa de la parte que desempeñó en Minneapolis”. MV 365.5