Es el privilegio de cada pecador preguntar a su maestro qué es realmente el pecado. Denme una definición del pecado. Tenemos una en 1 Juan 3: «El pecado es infracción de la Ley». Esta es la única definición de pecado en toda la Biblia. Vamos a leerla directamente de la Palabra, para que confirmen que está en la Biblia, que no les predicamos de otra Biblia. La leeremos precisamente del buen Libro, y comenzaremos en el inicio del capítulo: «Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios”. Ese es nuestro privilegio. SE1 202.2
«Por esto el mundo no nos conoce, porque no lo conoció a él”. Ahora bien, este conocimiento tiene un impacto en nosotros; pues la fe en Jesucristo constituye un elemento viviente que obra. ¿Qué hace? «Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro”. Hay muchos que tienen una fe solo de palabras, pero la fe debe llegar a ellos como un elemento viviente que obra en el alma. Es necesario que Cristo sea entronizado en el corazón. Pues, «todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro». ¡Maravilloso, maravilloso! Al contemplar a Cristo, al hablar de él, al contemplar la hermosura de su carácter, somos transformados. Transformados de gloria en gloria. ¿Y qué es la gloria? Es el carácter transformado. Por tanto, hay una obra de purificación que se inicia cuando contemplamos a Jesús. SE1 202.3
Si el enemigo nos hace creer en sus exposiciones y afirmaciones, empezaremos a generar otro carácter. Aceptaremos sus insinuaciones, y lo pondremos en el lugar de Dios. El Señor es el único en quien debemos creer. Hemos de vivir de cada palabra que sale de la boca de Dios. Aquí el enemigo presentó una mentira, y el hombre la creyó. Lo que debemos hacer es purificar nuestras almas por la obediencia a la verdad y educarnos en una fe firme. ¿En qué consiste esa fe? Es la fe que obra por el amor para purificar el alma de todo ídolo que hayamos entronizado en nuestra vida. No podemos abrigar un error porque haya sido pasado de generación en generación, hasta llegar a nuestro tiempo. Lo que necesitamos es la verdad, y la necesitamos en todo momento. SE1 203.1