Sra. Bateham. — Me gustaría decir que el punto que se ha planteado fue cuidadosamente considerado por la Unión de Mujeres Cristianas pro Temperancia, y vimos el peligro. Pero queríamos ser sumamente imparciales. Consulté a nueve personas de diferentes clases de gente del séptimo día, para saber si deseaban tal exención, y si estarían satisfechos con lo que se proponía. Ellos se representaron a sí mismos como de acuerdo con una provisión como la que se sugería, y pensamos que podía hacerse tal vez de tal modo como para proporcionarles la exención que deseaban, porque decían que esa exención era necesaria. LDN 119.3
Senador Blair. — Permítame hacerle algunas preguntas, Sra. Bateham, para ver si la Unión de Mujeres Cristianas pro Temperancia entendieron exactamente la relación de lo que ellas proponen hacer en esta legislación. He aquí un proyecto de ley que se relaciona con el comercio interestatal, con el trabajo del correo, con el ejército y con la marina. Se refiere a un tema extraído de la jurisdicción independiente y plena de una nación por los estados, que una vez fueron soberanías completas y transferidas al gobierno general. Las ocupaciones que mencioné son todas de naturaleza pública; y para realizarlas, la nación tiene la oportunidad de invadir las leyes de descanso sabático de cada estado de tal modo que se anulan. La nación en general no está restringida por ninguna ley de día de reposo. Si puede realizar su tarea de correo postal en el día de reposo, puede hacerlo en gran medida, y de hecho lo hace en una gran medida, y en una medida cada vez más extensa; lo mismo sucede en cuanto al comercio interestatal, y también con el ejército y la marina. LDN 119.4
Ahora, usted va a nuestros amigos bautistas del séptimo día o adventistas del séptimo día, por ejemplo, y propone presentarles un principio por el cual ellos pueden llevar adelante el departamento del correo postal en el día de reposo, tan completamente como lo vean conveniente. En otras palabras, usted propone exceptuarlos de la operación de la ley en cuando a su prohibición del trabajo postal en el día de reposo. Supóngase que el jefe de correos del país es un bautista del séptimo día. Supóngase que éste abre cada oficina postal del país en el día de reposo con personal bautista del séptimo día. Usted estaría operando el departamento de correos gracias a la exención, porque ellos pueden trabajar a conciencia en ese día. Si usted lo limita diciendo que el proyecto de ley no se aplica a los adventistas y otros, el proyecto ya contempla esto. LDN 120.1
Sra. Bateham. — Si usted recuerda la cláusula, no proponemos proveer que puedan hacer este trabajo, sino que estarían exentos del castigo. No se les permite hacer el trabajo. Pero se los exime del castigo. Por lo tanto, a menos que ellos demuestren que no hicieron el trabajo perturbando a otros, sería imposible que ellos cumplan los asuntos del correo, por ejemplo, o cualquier otro empleo público, en domingo. LDN 120.2
Senador Blair. — ¿No equivale eso a decir que si no se les impone el castigo, no hay ley contra ellos? Porque la ley sin el castigo es simplemente una opinión; no una ley. LDN 120.3
Sra. Bateham. — La ley podría proveer que ellos no deben abrir una oficina de correos, por ejemplo, o ningún lugar de comercio; y si se impusiera una multa, estarían obligados a cerrar tales lugares en domingo. Por supuesto, solo fue planteado como una sugerencia de nuestra parte de que si fuera posible, nos gustaría que hubiera tal provisión en el proyecto. Estamos satisfechos de que la gente quiera la ley, y si la ley puede, a su juicio, ser arreglada con una tal exención, entonces la deseamos; de otro modo, no. Todos estamos contentos, creo, de notar que estos señores no quieren tal exención, porque eso nos libera del lugar donde estábamos. LDN 120.4
Senador Blair. — Esta no ha de ser una ley dominical general. Estas personas todas viven en los estados, y pueden trabajar en sus ocupaciones privadas lo mismo bajo enmiendas similares a la ley del estado, si el estado viera apropiado hacer tales enmiendas. El Prof. Jones dice que no anduvo bien en Arkansas, y yo pensaría que así fue, por su descripción. Pero estas son ocupaciones públicas, o cuasi públicas, las que tratamos; la del comercio entre los Estados, por ejemplo, llevado a cabo por grandes corporaciones, que son públicas en relación con los trabajadores, porque están ejerciendo una gran función pública al llevar el transporte que pertenece a todos por todo el país. LDN 121.1
Esta ley se ocupa de prohibir la anulación de todas las leyes dominicales en los Estados, con el propósito de proveer que el comercio interestatal no se cumpla, en violación de la ley, en el día de reposo. Cuando uno va a las ocupaciones privadas que son reguladas por los Estados, si ellos eligen permitir que la gente bautista del séptimo día trabaje en domingo en sus ocupaciones privadas, en la granja, en el taller, en la fábrica, esta medida no interfiere en nada con ellos. LDN 121.2
Sr. Bateham. — No tengo las palabras ante mí, pero mi impresión es que hay una cláusula en el proyecto que provee que la jurisdicción del Congreso sea ejercida sobre los territorios en este asunto. Hay algo de este tipo en el proyecto, y esta exención propuesta fue diseñada para alcanzar aquellos casos, más bien que aplicarlos a la acción general del gobierno. LDN 121.3
Senador Blair. — ¿Usted cree que podría hacerse la exención con referencia a los territorios? LDN 121.4
Sra. Bateham. — Sí; ese era el punto que teníamos en mente en esta acción general. No tengo las palabras del proyecto de ley ante mí, pero hay algo de este tipo entre lo que teníamos en mente. Me gustaría decir también que uno de los pedidos de nuestra Unión de Mujeres Cristianas pro Temperancia era que la palabra promover fuera cambiada a proteger, en el título del proyecto de ley, de modo que no tuviera la apariencia de algo que objetamos todos los norteamericanos, cualquier unión de la Iglesia y el Estado. Esa enmienda fue propuesta y aceptada por la Unión Norteamericana del Día de Reposo, el cuerpo organizado que acaba de concluir su sesión en esta ciudad. LDN 121.5
Senador Blair. — ¿Cree usted que la palabra proteger implica el poder de mandar e imponer? Un ejército protege. LDN 121.6
Sra. Bateham. — Todas nuestras leyes nos protegen, ¿no es así? LDN 122.1
Senador Blair. — ¿Haría de esto una ley? LDN 122.2
Sra. Bateham. — Sugiero que el proyecto se convierta en ley, y que sea una ley que proteja el día de reposo civil, no que promueva la adoración religiosa, sino que proteja el día como un día de descanso y adoración religiosa. LDN 122.3
Senador Blair. — Me parece que la palabra proteja es más fuerte y que interfiere más que la palabra promueva. Sin embargo, todas estas sugerencias con importantes. LDN 122.4