Al hablar de este evento, el pastor Uriah Smith dijo: GMA 373.4
“Las circunstancias de su muerte difícilmente pudieron haber sido más favorables. Mientras estuvo consciente durante los últimos tres días de su enfermedad afirmó que no sufría dolor. Un gran grupo de amigos sinceros y lagrimosos entraron y salieron del edificio ese agradable sábado de tarde entretanto su vida se disipaba lentamente. Como si entrara en un sueño apacible, así fue en su muerte; y cuando todo había terminado, una dulce paz parecía estar fijada en cada rasgo. Era como si su oración hubiera sido respondida: GMA 373.5
“‘Dame esta hora para dormir, GMA 374.1
antes que me des tu dicha eterna; GMA 374.2
dame un día de reposo en la tierra, GMA 374.3
antes de la obra en el cielo’”. GMA 374.4
Tenía en ocasión de su muerte sesenta años y dos días de edad. La estima en la que lo tenían en Battle Creek fue evidenciada por el hecho de que por lo menos 2.500 personas estuvieron presentes en su funeral, el 13 de agosto, y fue acompañado a su lugar de descanso en el cementerio Oak Hill, por una procesión de noventa y cinco carruajes y una multitud a pie. GMA 374.5
De los muchos testimonios dados después de su muerte, y publicados en la Review, citamos lo siguiente de la pluma del pastor Haskell: GMA 374.6
“Cuando considero su sólido criterio en casi cada emergencia, su ternura de corazón y nobleza de alma manifestada hacia los que yerran, y aun hacia los que lo maltrataron, cuandoquiera veía evidencias de su arrepentimiento y su amor por lo que él creía era lo correcto, puedo ciertamente decir: Ha caído un padre en Israel. Y en tanto él descansa, la causa, así como muchas personas, echará de menos su previsión y cuidado paternal”. GMA 374.7
Cuando falleció, nuestros enemigos alegaron que el mensaje ahora debía detenerse. No fue así; esas instituciones que, bajo la mano divina, él había establecido, estaban destinadas a crecer a una magnitud mayor, a ser “como árboles del plantío de Dios”, de los cuales saldrían numerosas y fructíferas ramas. GMA 374.8