La obra que se efectúa en nuestros congresos debiera llevarse a cabo siguiendo las enseñanzas de Jesús y no según los métodos humanos. Hay que conseguir que los miembros de iglesia trabajen. Los ángeles de Dios dirigirán en la apertura de campos cercanos y lejanos, para que la obra de amonestar al mundo se complete con rapidez. Dios llama a los creyentes a que obtengan experiencia en la obra misionera al ir a nuevos territorios y trabajar con inteligencia por la gente. Los que hagan esto encontrarán abundantes oportunidades de trabajo. 9TPI 97.3
En el proceso de atender a las personas que manifestaron interés durante un congreso, se requieren auxiliares en diversas líneas, y estas oportunidades debieran considerarse como escuelas de capacitación para los obreros. Que los jóvenes trabajen con obreros experimentados, quienes orarán con ellos y los instruirán pacientemente. Mujeres consagradas debieran dedicarse a dar estudios bíblicos de casa en casa. Algunos obreros debieran dedicarse al colportaje para vender nuestras publicaciones y darlas juiciosamente a quienes no puedan comprarlas. 9TPI 98.1
Los que están cabalmente convertidos deben capacitarse cada vez más en su comprensión de las Escrituras, para poder hablar palabras de luz y salvación a quienes están en las tinieblas y perecen en sus pecados. Como obreros juntamente con Dios, podemos esperar bendiciones especiales y resultados definidos mientras nos esforzamos por salvar almas de las trampas de Satanás para que se conviertan en hijos de luz. 9TPI 98.2