Satanás presenta sus teorías en forma cautelosa al comienzo, y si ve que sus esfuerzos tienen éxito, introduce teorías que son todavía más erróneas. Busca así apartar a hombres y mujeres de los principios fundamentales que Dios estableció como salvaguardias de su pueblo. MM 121.2
Que nuestros obreros misioneros médicos no acepten teorías que Dios no ha dado a nadie. Dios no excusará a los hombres por enseñar teorías que Cristo no ha enseñado. Él hace una apelación a su ejército de obreros para que se pongan en línea, tomando su lugar bajo el estandarte de la verdad. Él les advierte que no ocupen su tiempo en tratar asuntos que Dios no ha autorizado a ningún ser humano debatir. MM 121.3
Vistámonos de toda pieza de la armadura cristiana, y resistamos persistentemente al enemigo. Podremos tener que enfrentar ángeles caídos y al príncipe de las potestades de las tinieblas. Satanás de ningún modo está dormido; está bien despierto, y planea el juego de la vida para ganar las almas del pueblo de Dios. Vendrá con engaños de toda clase, para desviar al pueblo de Dios de su fidelidad. Él desea desviar la atención de ellos de los asuntos reales a las falsas teorías. MM 121.4