El salmista dice: “La exposición de tu palabra alumbra; hace entender a los sencillos”. Salmos 119:130. Cuando la verdad actúa solamente sobre la conciencia, crea mucha incomodidad; pero cuando se invita a la verdad a entrar en el corazón, todo el ser es llevado en cautividad a Jesucristo. Aun los pensamientos son capturados, pues la mente de Cristo trabaja donde la voluntad está sometida a la voluntad de Dios. “Haya, pues, en vosotros este sentir [manera de pensar, DHH] que hubo también en Cristo Jesús”. Filipenses 2:5. La persona que ha sido liberada por el Señor es realmente libre, y no puede ser llevada a la esclavitud servil del pecado.—Manuscrito 67, 1894. 1MCP 322.1