Veneno espiritual disimulado
Muchos son inducidos a pensar que se hallan en el camino al cielo porque profesan creer en Cristo, mientras rechazan la ley de Dios. Pero al final descubrirán que estaban en el camino que conduce a la perdición y no al cielo. El veneno espiritual es disimulado por medio de la doctrina de la santificación, y suministrado a la gente. Millares lo tragan anhelosamente, sintiendo que si tan sólo son honestos en su creencia han de estar a salvo. Pero la sinceridad no convertirá el error en verdad. Un hombre puede tragar veneno pensando que es alimento; pero su sinceridad no lo salvará de los efectos de la dosis.FO 32.2
Dios nos ha dado su Palabra para que sea nuestra guía. Cristo dijo: “Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí”. Juan 5:39. El oró por sus discípulos: “Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad”. Juan 17:17. Pablo dice: “Yo ciertamente había creído mi deber hacer muchas cosas contra el nombre de Jesús de Nazaret”. Hechos 26:9. Pero esta creencia no hizo que ese proceder fuera correcto. Cuando Pablo recibió el Evangelio de Jesucristo, ese Evangelio lo convirtió en una nueva criatura. Fue transformado; la verdad plantada en su alma le dio tal fe y coraje como seguidor de Cristo que ninguna oposición pudo moverlo, ningún sufrimiento acobardarlo.FO 32.3
Los hombres pueden elaborar cualquier excusa que les plazca para rechazar la ley de Dios; pero ninguna excusa será aceptada en el día del juicio. Los que contienden con Dios y endurecen sus almas culpables en la transgresión, muy pronto deberán enfrentar al Gran Legislador en relación con su ley quebrantada.FO 33.1
El día de la venganza de Dios vendrá -el día del furor de su ira. ¿Quién soportará el día de su venida? Los hombres han endurecido sus corazones contra el Espíritu de Dios, pero las flechas de su ira penetrarán donde los dardos de la convicción no pudieron. Antes de mucho Dios se levantará para ocuparse del pecador. El falso pastor, ¿protegerá al transgresor en ese día? ¿Hallará excusa el que se unió a la multitud en la senda de desobediencia? La popularidad o los Números, ¿harán inocente a alguien? Estas son las preguntas que los negligentes e indiferentes deberían considerar y resolver.FO 33.2