Loading...
Larger font
Smaller font
Copy
Print
Contents

Mensajera del Señor

 - Contents
  • Results
  • Related
  • Featured
No results found for: "".
  • Weighted Relevancy
  • Content Sequence
  • Relevancy
  • Earliest First
  • Latest First
    Larger font
    Smaller font
    Copy
    Print
    Contents

    Una líder visionaria en asuntos sociales

    Elena de White mantenía un equilibrio inspirado en sus consejos a miembros de iglesia, notablemente en cuanto a responsabilidades sociales. El propósito y la motivación principales de todo servicio cristiano es proclamar el Evangelio de la restauración. 33 Ver pp. 257, 344 Ninguna rama individual del servicio cristiano debe llegar a ser “totalmente absorbente” de manera que “aquello que debiera tener el primer lugar se convierte en una consideración secundaria”.34Welfare Ministry, p. 256.MDS 366.6

    Los pobres y los menos favorecidos. Al referirse al trabajo en favor de los que están en una situación desventajosa ella enunció el principio del equilibrio: “La gran cuestión de nuestro deber hacia la humanidad es un asunto serio, y se necesita mucho de la gracia de Dios para decidir cómo trabajar de manera que se logre la mayor cantidad de bien... Dios no requiere a sus obreros que obtengan su educación y preparación a fin de dedicarse exclusivamente a estas clases. La operación de Dios se manifiesta en una manera tal que establecerá confianza en que la obra es dirigida por él, y que a la base de cada acción hay principios sólidos”.MDS 366.7

    Elena de White vio el peligro de concentrarse en ciertos tipos de obra social, “lo que contribuirá en forma mínima al fortalecimiento de todas las partes de la obra mediante una acción armoniosa”.35Id, p. 257.MDS 366.8

    Mientras recalcó su preocupación por el equilibrio y las prioridades, hizo claro que la responsabilidad del cristiano hacia las necesidades de otros es tan importante como su deber hacia Dios. Esto puede parecer bueno en teoría pero es más difícil llevarlo a la práctica. Demasiado a menudo los cristianos están más preocupados con la primera mitad de la orden del Señor: “Amarás al Señor con todo tu corazón...” El cumplimiento de la otra mitad de la orden de Cristo, “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (Mat. 22:39), “se deja librad[o] al capricho, y se sujeta a la inclinación o al impulso”.36Palabras de vida del gran Maestro, p. 315.MDS 366.9

    Los cristianos genuinos comprenden que su profesión religiosa tiene “poco peso” ante Dios o el hombre si dedican “toda energía a alguna obra aparentemente grande, mientras descuida[n] a los menesterosos y aparta[n] al extranjero de su derecho”.37Id, p. 316.MDS 366.10

    Los cristianos también creen que “cuando el yo está sumergido en Cristo, el amor brota espontáneamente”. ¿Cómo se revela esta espontaneidad? Elena de White declaró: “La plenitud del carácter cristiano se alcanza cuando el impulso a ayudar y beneficiar a otros brota constantemente de adentro”.38Id, p. 317. “Siempre que haya un impulso de amor y simpatía, siempre que el corazón anhele beneficiar y elevar a otros, se revela la obra del Espíritu Santo de Dios”.—Ibid.MDS 366.11

    Para plantear la cuestión de los asuntos sociales en su punto más preciso, ella escribió con claridad inequívoca que el juicio de todos los hombres y mujeres descansa en “un punto... Cuando las naciones estén reunidas delante de él, habrá sólo dos clases; y su destino eterno quedará determinado por lo que hayan hecho o dejado de hacer por él en la persona de los pobres y dolientes”.39El Deseado de todas las gentes, p. 592.MDS 367.1

    ¿Cómo opera este profundo principio? Note cómo Elena de White se concentra en Isaías 58, el capítulo sobre la responsabilidad del cristiano hacia los necesitados y los que se encuentran en situación desventajosa.40 En el Comprehensive Index to the Writings of Ellen G. White, aproximadamente 200 referencias se hasan en Isaías 58. Ella se refirió frecuentemente al capítulo 58 de Isaías como el “mensaje para este tiempo, que debe ser dado una y otra vez”, y agregó que “el capítulo entero es de la mayor importancia”. 41Ministerio de la bondad, pp. 33-38.MDS 367.2

    En el consejo abundante de la Sra. White respecto a la responsabilidad del cristiano hacia otros42 Ver Calvin B. Rock, “Did Ellen White Downplay Social Work?”, Adventist Review, 5 de mayo, 1988. se describen “tres arenas de servicio”. La primera arena es la responsabilidad de la iglesia local hacia su propia congregación: “Es el deber de cada iglesia hacer cuidadosos y juiciosos arreglos para la atención de sus pobres y enfermos”.43Ministerio de la bondad, p. 189.MDS 367.3

    La comunidad local es la segunda arena: “Dondequiera que se establezca una iglesia, sus miembros deben hacer una obra fiel por los creyentes menesterosos. Pero no deben cesar con éstos. Deben ayudar también a oíros, sin tener en cuenta su fe”.44Id, p. 188.MDS 367.4

    La tercera arena es la comunidad mundial, fuera de la comunidad local: “Cualquier ser humano que necesita nuestra simpatía y nuestros buenos servicios, es nuestro prójimo. Los dolientes e indigentes de todas clases son nuestros prójimos; y cuando llegamos a conocer sus necesidades, es nuestro deber aliviarlos en cuanto sea posible... Nuestros prójimos son toda la familia humana”.45Id, p. 49MDS 367.5

    Cuando los adventistas de hoy día consideran estos tres escenarios, piensan inmediatamente en las Sociedades Dorcas, rebautizadas en años recientes como Servicios a la Comunidad, y en OFASA (Obra Filantrópica y Asistencia Social Adventista), también rebau tizada en la década de 1980 con el nombre de Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA). Por ejemplo, durante los servicios de socorro que se necesitaron al fin de la Segunda Guerra Mundial, entre 1946 y 1949, las organizaciones de socorro (te la Asociación General “proveyeron más de 1.497.000 kilogramos de alimentos y 499,000 kilogramos de ropa” sólo a Europa. 46 Land, Adventism in America, p. 178.MDS 367.6

    En 1995, ADRA, trabajando en 142 países, administró ayuda humanitaria (incluyendo material donado) por valor de más de 120 millones de dólares. El presupuesto de las operaciones de ADRA, con su sede en Silver Spring, Maryland, excedió los 60 millones de dólares.47Informe Annual de ADRA, 1995. Adventist Development and Relief Agency (Agenda Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales), 12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 20904, USA.MDS 367.7

    Larger font
    Smaller font
    Copy
    Print
    Contents